Cada día que pasa son más las corporaciones, pymes o administraciones públicas que sufren un ciberataque en su red de datos, en el mejor de los casos la empresa se queda sin poder operar durante unas horas o días, en el peor, los datos nunca van a poder ser recuperados y la empresa desaparecerá. ACTUALIZACIÓN: Comencé a escribir este artículo el domingo 18 de abril, hoy es sábado 24 de abril, durante esta semana en España se han producido al menos cinco ciberataques graves contra empresas privadas y administraciones públicas, prácticamente un ataque por día. De ahí la importancia de aplicar políticas de ciberseguridad en nuestras redes, será caro hacerlo (que tampoco lo es tanto), pero mas caro es no hacerlo.
En este artículo no os voy a contar como protegeros de un WannaCry, NotPetya, Ryuk, Cobalt Strike, Mirai y del resto de animales del zoológico ciber o quizás sí, tampoco os voy a decir que instaléis un antivirus, me imagino que ya lo habéis hecho. Es cierto que podemos englobar los ciberataques actuales en dos grandes bloques, las APT (Amenazas Persistentes Avanzadas), es decir, un ataque en el que se su objetivo se centra en una única empresa o corporación y hasta que no lo consiga, no parará, por suerte no son los más comunes. El segundo tipo de ciberataque son los del tipo indiscriminado, es decir, un grupo de cibercriminales lanza su ataque de forma global a miles de usuarios sabiendo que un pequeño porcentaje de ellos se convertirá en víctimas, estos si son los más habituales hoy en día.